El Atleti y la Alquimia

En términos de fútbol, los dos componentes de la felicidad son el de la victoria y el del buen juego. Cuando estos dos componentes se funden en uno solo, es cuando nos encontramos en un estadio de felicidad completa.

Es archioído que el dinero da la felicidad. Quizás, por eso, desde la antigüedad, la obsesión de los alquimistas era conseguir la fórmula de la piedra filosofal que todo lo que tocase lo convertiría en oro. La transmutación de la materia disfrutó de uno de sus momentos más dulces cuando la física consiguió, mediante reacciones nucleares, convertir átomos de plomo en átomos de oro. El problema es que estos áureos átomos se desintegraban exactamente a los cinco segundos de su existencia.

Desde el regreso a la primera división, el Atleti ha utilizado 97 jugadores, de los cuales 62 fueron fichajes. Es decir, una media aproximada de 10 fichajes por temporada. La búsqueda de la piedra filosofal continúa y seguimos empeñándonos en convertir en oro lo que es simple latón.

Luis Aragonés dio, por fin, con la fórmula: “la felicidad es un número indefinido y disperso de momentos de cinco segundos y lo que se necesita es un crisol capaz de atrapar todos esos momentos y hacer que perduren, al menos, noventa minutos”. Luis no encontró un crisol lo bastante grande y tuvo que utilizar tres: Xavi, Iniesta y Cesc.

Yo no creo que Forlán, Simao, Maxi, Raúl García, Camacho y Antonio López sean oro y que el Kun, que sí que lo es, sea la piedra filosofal. No, la receta no es esa, estaba equivocada. La llegada de los nuevos fichajes sustituye alguno de nuestro inservible latón por plata y aún no tenemos ni tan siquiera un crisol.

Pero, el verdadero problema es que Aguirre no es Merlín y, además, no estoy seguro de que sepa sacar y guardar todos los cinco segundos para formar noventa minutos.

P.D. En la fórmula de luis, el entrecomillado no pretende reproducir sus palabras (sino las mias)